PAC 12 – Una revisión del político y el científico Dividendos y sospechas mundiales alrededor de las políticas de vacunación

Por Clément Paule

Traducción : Daniel Del Castillo

Passage au crible n°12

La Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (APCE) debía llevar a cabo, a finales de enero de 2010, una investigación sobre la amenaza de las falsas pandemias. En efecto, la subcomisión de Salud de esta institución criticó, en una moción votada el 18 de diciembre de 2009, las presuntas colusiones entre la industria farmacéutica y expertos de la OMS (Organización Mundial de la Salud). En este caso, se trataría de evaluar la administración de la pandemia de gripe A/H1N1 y, en particular, la campaña mundial de vacunación promovida a nivel global. Esta polémica aparece reforzada por los últimos informes epidemiológicos que confirman la fuerte disminución de la actividad del virus en varios países, sobre todo en los Estados Unidos y en la mayor parte de Europa y Asia. Se sospecha que los grandes laboratorios big pharma contribuyeron a crear una psicosis que les habría permitido vender productos insuficientemente probados y, beneficiarse de las políticas públicas de inmunización. El laboratorio británico GSK (GlaxoSmithKline), que comercializó de manera masiva su vacuna Pandemrix™, anunció el 15 de enero de 2010, un volumen de facturación equivalente a 945 millones de euros durante el cuarto trimestre de 2009.

Contexto histórico
Marco teórico
Análisis
Referencias

Contexto histórico

Desde su aparición durante la primavera de 2009, el virus H1N1 habría causado más de 14 000 muertes en 209 Estados. Sin embargo, la lucha transnacional contra la pandemia se orientó rápidamente hacia las medidas de vacunación celebradas por el grupo de expertos SAGE (Strategic Advisory Group of Experts on Immunization) de la OMS. No obstante, las estrategias de prevención de las autoridades nacionales se han caracterizado por una gran heterogeneidad. Al respecto, algunos Estados como Francia, Canadá o Suiza optaron por una cobertura vaccínea de nivel máximo, señalando a más del 75% de la población. En cambio, en Alemania y los Estados Unidos se optó por una política más moderada y de la misma manera, únicamente el 5% de la población china o sea 65 millones de personas fue inmunizada a principios del año 2010. Por su parte, las campañas vietnamitas o sauditas también comenzaron durante este período. Al contrario, Polonia se presenta como la excepción, negándose, en noviembre de 2009, a la compra de productos farmacéuticos, que estimaban poco fiables. Hay que señalar además que, numerosos Estados no pudieron acceder inmediatamente al mercado de las vacunas. Mientras que los pedidos masivos solicitados por los países del hemisferio Norte más de mil millones de vacunas en septiembre de 2009, fueron satisfechos prioritariamente.

Por otro lado, la modificación del esquema de inmunización durante noviembre de 2009 con la restricción a una sola inyección en lugar de las dos previstas inicialmente transformó las políticas nacionales y creó varios excedentes. Esta situación se agravó debido a las reservas de la población frente a la vacuna, que finalmente solo afectó al 8% de los franceses – es decir, 5 millones y apenas medio millón de marroquíes o incluso menos de 4 millones de británicos. Finalmente, 62 millones de norteamericanos siguieron la recomendación de la OMS, a pesar del precedente histórico de 1976, cuando la sospecha de una epidemia de gripe porcina produjo una vasta campaña de prevención.

Marco teórico

1. El principio de precaución. Incluido en la Declaración de Río sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo de junio de 1992, este principio responde a la incertidumbre causada por las amenazas medioambientales y sanitarias. Consignado en la Constitución de Francia en el 2005, después de los casos de sangre contaminada y la enfermedad de las vacas locas (MCD), el principio fue invocado para justificar las campañas masivas de prevención del virus H1N1.
2. Las controversias socio-técnicas. Este concepto, propuesto por Michel Callon, Pierre Lascoumes y Yannick Barthe, pretende restaurar las polémicas que tratan sobre la definición de situaciones particularmente difíciles de gobernar. Así es que la administración de la pandemia entra a hacer parte de un contexto de incertidumbre, en el cual el discurso de autoridad científica es discutido por varios estudios rivales.

Análisis

El liderazgo de la OMS en la administración de la pandemia demostró el poder normativo de esta institución, que define los contenidos de las políticas nacionales de prevención. A pesar de todo, la legitimidad de esta organización se vio afectada cuando su directora reconoció, el 18 de enero de 2010, un exceso de prudencia frente a la gripe A/H1N1, exceso que justificó por un imperativo de salud pública. La referencia al principio de precaución abrió entonces una ventana de oportunidades a numerosos actores críticos, que defienden un peritaje alternativo, incluso profano. Hay que destacar a este respecto, que algunos médicos manifestaron rápidamente su escepticismo frente a las campañas de vacunación aconsejadas por el SAGE. En julio de 2009, uno de ellos mencionaba, por ejemplo, que intereses financieros e industriales habrían sobrevalorado la amenaza de los virus gripales. Pero la OMS también fue blanco de teorías conspiracionistas que la acusaban pura y simplemente de haber creado la pandemia. La periodista Jane Burgermeister denunció particularmente a la Organización y al laboratorio Baxter por bioterrorismo e intento de genocidio.

Estas denuncias, que hasta ahora habían sido poco mediáticas, se intensificaron por la decepción de las campañas de vacunación, consideradas como desproporcionadas – por ejemplo, los 13 millones de dosis encargadas por Suiza para sus 7,7 millones de habitantes frente a una pandemia que finalmente era moderada. Por esta razón los quince expertos del SAGE centraron las sospechas de connivencia con la industria farmacéutica, conocida por sus capacidades de lobbying. Desde diciembre de 2009, en varias ocasiones la OMS se ha visto obligada a justificarse públicamente, a petición de algunos Estados miembros, como India y Vietnam. Por un lado se ha esforzado en ofrecer garantías de transparencia, y por otro a pesar de la confidencialidad del debate – en precisar las barreras que han de permitirle evitar los conflictos de intereses que impliquen a sus expertos. Pero al perder el monopolio en el discurso de autoridad científica sobre las técnicas, éstos últimos aparecen, sin embargo, deslegitimados. Esta configuración del conocimiento – asimilada, por Jürgen Habermas, en lo absoluto a una ideología aparece criticada, con abiertas acusaciones, así como con resistencias pasivas, como las bajas tasas de vacunación, a pesar de las recomendaciones del SAGE.

La proliferación y la creciente audiencia de los discursos alternativos, que toman forma de peritajes contrarrestadas, van acompañados por el debilitamiento del modelo vertical de información y decisión. Este proceso recuerda a otras controversias socio-técnicas, como la de la contaminación sanguínea o la enfermedad de las vacas locas, que mezclaron incertidumbre científica y estrategias divergentes por parte de los actores. Sin embargo, la especificidad del caso que nos estamos analizando se basa principalmente en el efecto perverso inducido por la prevención. Como demuestra la defensa de ciertos gobiernos, al ser criticados por su administración del riesgo pandémico. De esta manera, en Francia, la Ministra de Salud respondió a sus detractores apelando igualmente al principio de precaución. Esta norma, que según François Ewald obligaría a exagerar la amenaza, parece una justificación necesaria para los responsables políticos, especialmente en caso de incertidumbre. En efecto, los costos políticos de una catástrofe fortuita los llevaría sistemáticamente a considerar lo peor. Dentro de esta lógica, la acción pública dependería cada vez más de estudios que permitan definir los riesgos potenciales. No obstante, frente a un fracaso, se repartiría la responsabilidad entre los gobernantes y sus consejeros, lo que puede acarrear una falta de legitimidad general. El error de un peritaje oficial poco transparente podría entonces sumarle al riesgo sanitario, los peligros de un mercado de la ansiedad fácilmente explotable.

Referencias

Callon Michel, Lascoumes Pierre, Barthe Yannick, Agir dans un monde incertain. Essai sur la démocratie technique, París, Seuil, 2001.
Ewald François, Gollier Christian, De Sadeleer Nicholas, Le Principe de précaution, París, PUF, 2009. Col. Que sais-je ?
Habermas Jürgen, La Technique et la science comme « idéologie », París, Gallimard, 1990 [1968].
InVS (Institut de Veille Sanitaire), Stratégies vaccinales A (H1N1) 2009 dans 18 pays d´Europe, d´Amérique du Nord, d´Asie et d´Océanie, 31 de octubre de 2009, en la dirección Web : http://www.invs.sante.fr/international/notes/strategies_vaccinales_a_h1n1_monde_311009.pdf [22 de enero de 2010].
Página Web del Portal de la OMS dedicada a la pandemia de la gripe A/H1N1: http://www.who.int/csr/disease/swinefl

PAC 11 – La comercialización mundial de la salud pública La estrategia empresarial de las compañías farmacéuticas

Por Clément Paule

Traducción : Daniel Del Castillo

Passage au crible n°11

La reforma del sistema de salud norteamericano se enfrentó en enero de 2010 a la oposición de las compañías farmacéuticas reunidas en el PHRMA (Pharmaceutical Research and Manufacturers of America). Estas industrias se niegan a que el período de doce años, durante el cual poseen el monopolio de explotación de sus productos, sea reducido como lo desea el presidente Barack Obama. Por esta razón, amenazan a la Casa Blanca y al Congreso con “retirar su apoyo” al proyecto de ley. Esta amenaza evoca implícitamente los considerables recursos de estos actores privados, sobre todo en lo que respecta al lobbying sobre los parlamentarios. Objeto de numerosas críticas, la industria farmacéutica representa un sector atípico: 1) Por los beneficios que acumula cada año: a pesar de la crisis financiera, IMS (Intercontinental Medical Statistics) Health estimaba por ejemplo que, en el 2008, el mercado mundial de medicamentos valía 770 mil millones de dólares. 2) Por la especificidad de los bienes producidos que apuntan hacia lo terapéutico universal y están, por ende, estrechamente ligados a los sistemas de protección social.

Contexto histórico
Marco teórico
Análisis
Referencias

Contexto histórico

De producción artesanal durante largo tiempo, la fabricación de productos farmacéuticos se transformó en una verdadera industria a finales del siglo XIX. El aporte de la química acelera en ése momento el ritmo de los inventos terapéuticos. Se pueden citar al respecto, la aspirina descubierta por Bayer hacia 1985 o también, las penicilinas sintéticas. Pero el auge mundial de estas empresas comenzó después de 1945, cuando compañías norteamericanas como Pfizer se internacionalizaron, aprovechando la creación de sistemas de protección social. De hecho, la segunda mitad del siglo XX se caracterizó por el surgimiento de competidores europeos y japoneses además del establecimiento de poderosas multinacionales farmacéuticas.

Desde los años ochenta, se observa un movimiento de concentración en este sector, movimiento que tiene propensión a la integración mundial de la producción. De esta manera, los dos gigantes británicos GlaxoWellcome y SmithKlineBeecham PLC se fusionaron en el 2000 por 75,9 mil millones de dólares, mientras que Pfizer compró Wyeth en el 2009 por 68 mil millones de dólares. Esta reestructuración consagra la dominación de unos veinte laboratorios llamados big pharma, en mayoría 1) norteamericanos Johnson & Johnson, Merck, 2) europeos – Sanofi-Aventis (Francia), Novartis (Suiza), AstraZeneca (anglo-sueco) y 3) japoneses (Takeda). En cuánto al resto del sector, se compone de estructuras medianas muy especializadas, empresas biotecnológicas y fabricantes de medicamentos genéricos.

Marco teórico

La Economía Política Internacional resalta particularmente los efectos de la globalización de la industria farmacéutica, y sobre todo el impacto normativo de sus actores en las políticas nacionales de salud pública.

1. El poder estructural (structural power). Este concepto, propuesto por Susan Strange, permite destacar el papel internacional de estos interventores económicos no-estatales. Ocupando posiciones dominantes en las estructuras de producción y financiación, pero también en aquellas de seguridad y saberes, los big pharma logran orientar tanto el contenido de las normas sanitarias como su difusión.
2. Diplomacia no-estatal y difusión normativa. Gracias a los diversos recursos que están a su disposición como el lobbying, la industria farmacéutica ha producido un fuerte impacto en las negociaciones internacionales y las políticas de salud pública estatales.

Análisis

Concentración y financiarización de un oligopolio. El grupo de los big pharma se desarrolla al ritmo de las fusiones y/o adquisiciones, necesarias para compensar la reciente desaceleración de la innovación y sostener presupuestos de investigación en constante aumento. Las OPA (Ofertas Públicas de Adquisición) hostiles, la rivalidad transatlántica y las estrategias predatorias coexisten sin embargo con tendencias a la organización en cartel, la cooperación, e incluso la colusión. Fue así que en el 2001, ocho laboratorios fueron condenados por la Comisión Europea a pagar una multa de 850 millones de euros por haber establecido un pacto ilícito en la venta de vitaminas. De igual forma, el co-marketing acuerdo que busca conquistar mercados extranjeros sigue siendo una práctica desarrollada por las grandes compañías, generalmente cotizadas en la bolsa.

Lobbying internacional para la propiedad intelectual. El peso financiero del sector se refleja en el ámbito mundial, en el marco de la IFPMA (International Federation of Pharmaceutical Manufacturers and Associations). Los big pharma, apoyados por sus respectivos Estados, defienden sobre todo la propiedad intelectual, vital para una industria basada en la innovación. Dentro de esta misma lógica, la Federación jugó un papel central, a mediados de los años noventa, en las negociaciones de la OMC (Organización Mundial del Comercio) sobre los ADPIC (Aspectos de los Derechos de Propiedad Intelectual relacionados con el Comercio). Estos acuerdos fueron vitales para las grandes compañías que buscan mantener un monopolio de explotación sobre sus medicamentos más rentables, especialmente frente a los países emergentes. En ése caso, se trataba de entorpecer la difusión de medicamentos genéricos, copias menos costosas de productos farmacéuticos que son de dominio público. En 1998, 39 laboratorios entablaron incluso un proceso contra el gobierno sudafricano por violación de los Derechos de Propiedad Intelectual. No obstante, fueron obligados a retirar su queja tres años más tarde, cuando perdieron el apoyo de los países occidentales después de las campañas mediáticas llevadas a cabo por numerosas ONG. Dicho de otra manera, las compañías no pueden prescindir del soporte brindado por ciertos actores estatales, con los cuales mantienen relaciones variables que van desde el proteccionismo económico Francia y Aventis en el 2004 hasta el conflicto abierto cuando se trata de reformar los sistemas de salud.

Múltiples impactos en las políticas sanitarias de los Estados. A pesar de las tensiones, la industria farmacéutica se muestra como un poderoso productor de normas por su influencia sobre la investigación y su dominio del mercadeo. En efecto, desde las más altas instituciones, las grandes compañías participan en la definición de los problemas de salud pública, sin vacilar al momento de medicar comportamientos que hasta ahora no habían sido considerados como patológicos. La invención de enfermedades como el envejecimiento fisiológico , se presenta por lo tanto como una solución al déficit de innovación terapéutica. La difusión mundial de los productos creados de esta manera está garantizada por las actividades promocionales llevadas a cabo y el lobbying realizado entorno a los profesionales de la salud, incluso a los pacientes mismos, a través de programas de observancia y tratamientos preventivos.

Lógicas económicas contradictorias con los objetivos de la salud pública. Los laboratorios participan en la profundización de las desigualdades mundiales ya que orientan sus inversiones hacia las patologías más rentables cáncer, enfermedades cardiovasculares para asegurar su presencia en los mercados norteamericano o europeo. Pero esta decisión estratégica no es favorable para las enfermedades infecciosas que arrasan los Países En Desarrollo.

Problemáticas de una regulación mundial. A pesar de que el sector permanece efectivamente regulado por algunas grandes agencias estatales, como la FDA (Food and Drug Administration) en los Estados Unidos o la EMEA (Agencia Europea de Medicamentos) en la Unión Europea, ninguna institución se encuentra actualmente encargada de llevar a cabo esta misión a nivel mundial. Hasta el día de hoy, los organismos de control existentes no disponen de presupuestos comparables entre ellos y actúan únicamente desde las altas instancias, a través de la expedición de las Autorizaciones de Comercialización (AMM), con ensayos clínicos realizados por la industria. Desde luego, el medicamento parece obedecer a las lógicas de un mercado muy lucrativo, y la salud hace de simple producto comercial, más que de Bien Público Mundial.

Referencias

Abécassis Philippe, Coutinet Nathalie, « Caractéristiques du marché des médicaments et stratégies des firmes pharmaceutiques », Horizons stratégiques, (7), 2008, Págs. 111-139.
Hamdouch Abdellah, Depret Marc-Hupert, La Nouvelle économie industrielle de la pharmacie : structures industrielles, dynamique d´innovation et stratégies commerciales, París, Elsevier, 2001.
Juès Jean-Paul, L´Industrie pharmaceutique, París, PUF, 1998. Col. Que sais-je ?
Pignarre Philippe, Le Grand secret de l´industrie pharmaceutique, París, La Découverte, 2003.
PwC (Pricewaterhouse Coopers), Pharma 2020 : the Vision Which Part will you Take ?, 2007, consultado el 14/01/2010 en el portal web de PwC : http://www.pwc.com/gx/en/pharma-life-sciences/pharma-2020/pharma-2020-vision-path.jhtml

PAC 10 – Una gobernanza mundial para las migraciones Foro Global sobre Migración y Desarollo, Atenas, Noviembre de 2009.

Por Catherine Wihtol de Wenden

Traducción : Daniel Del Castillo

Passage au crible n°10

En el transcurso de la primera semana de Noviembre de 2009, tuvo lugar en Atenas el tercer Foro Global sobre Migración y Desarrollo. Este acontece después de los Foros sobre el mismo tema que tuvieron lugar en Bruselas en el 2007 y Manila en el 2008. Esta cumbre representa un proyecto de gobernanza mundial para las migraciones, que asocia a los países receptores, Organizaciones Intergubernamentales, ONGs, asociaciones, sindicatos, entidades patronales y expertos.

Contexto histórico
Marco teórico
Análisis
Referencias

Contexto histórico

En 1994, la Conferencia Internacional sobre la Población de El Cairo mencionó, por primera vez, las migraciones internacionales como un tema de interés internacional. Diez años más tarde, después del GMG (Geneva Migration Group, ancestro del actual Global Migration Group), el Secretario General de las Naciones Unidas, Kofi Annan, apoyó esta iniciativa con la instauración del diálogo de Alto Nivel que tuvo lugar en Nueva York en 2006, y que permitió la creación de los Foros Anuales de Migración y Desarrollo. En estas circunstancias, se trataba de dificultar las derivas de las políticas intergubernamentales de los países receptores. En efecto, éstos últimos siempre han insistido en el control fronterizo, que ha producido múltiples efectos negativos y graves violaciones a los Derechos Humanos.

Desde 2004, varios organismos internacionales el GMG, ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados), OIT (Organización Internacional del Trabajo) y OIM (Organización Internacional para las Migraciones) propusieron elaborar un mecanismo multilateral con el objeto de desarrollar una plataforma común en materia de políticas migratorias. Considerando el bloqueo a la movilidad como una pérdida económica, social y cultural para los países tanto de acogida como de origen, y para los mismos migrantes, estos organismos quisieron asegurar la movilidad a escala mundial y transformarla en un factor de desarrollo.

Marco teórico

Se trata de un doble proceso. Por un lado, las migraciones se definen como un BPM (Bien Público Mundial), problema central de la gobernanza mundial. Por otra parte, se promueve el multilateralismo como el método de negociación entre dos actores que tienen intereses opuestos.

1. Las migraciones, Bien Público Mundial. Los trabajos de los expertos demostraron que la movilidad constituye un elemento esencial del Desarrollo Humano. Con el fin de reducir las desigualdades a escala planetaria, ellos indicaron que sería conveniente y consecuente apoyar políticamente la movilidad para erigirla como un BPM.
2. El multilateralismo, como método. En el marco de las Naciones Unidas, el compromiso de 2006 consistió en asociar Migración y Desarrollo, dos nociones centrales de los foros mundiales posteriores. Recalquemos tres lineamientos importantes: 1) Un diálogo sobre las migraciones y el desarrollo puede ser objeto de compromiso, a condición de que exista un intercambio entre posiciones enfrentadas. 2) La migración debe ser tratada en relación al desarrollo, sin centrarse exclusivamente en las repercusiones económicas de las transferencias de fondos de los emigrantes, sino más bien en la innovación y libertad que facilita la movilidad. 3) Es importante concentrarse en las medidas funcionales que permiten administrar las migraciones de manera positiva, siguiendo un procedimiento que favorece a todos, tanto a los países de acogida, como a los de origen y a los propios migrantes. El multilateralismo también ofrece la oportunidad, a los diferentes protagonistas, de manifestar el carácter fuertemente transnacional de los flujos migratorios y de los comportamientos que resultan de éstos. Dentro de esta lógica, el multilateralismo también expone la creación de redes económicas, familiares, sociales y culturales. Esta diplomacia de las migraciones permite exceder el enfoque de seguridad, que no ve en las migraciones sino el paso y control de las fronteras, así como las violaciones a la soberanía estatal.

Análisis

Los tres foros que tuvieron lugar en Bruselas, Manila y Atenas reunieron, separadamente, a los Estados de inmigración y emigración con el mundo de las asociaciones 1000 participantes en Atenas, asociaciones de migrantes, asociaciones de defensa de los Derechos, expertos, sindicatos, empleadores, asociaciones de desarrollo. En cuánto a sus intereses, que permanecen dispersos, son incluso contradictorios. Además, la mayoría de las asociaciones, al igual que los países receptores, concentraron sus esfuerzos en torno a la firma de la Convención de 1990, por parte de los Estados del Norte. Este tratado, además de incluir los derechos para los emigrantes en situación irregular incluso los emigrantes ilegales, formula los de todos los trabajadores emigrantes y los de sus familiares. Habiendo entrado en vigor en el 2003, incluye también artículos consagrados a la cooperación internacional. Pero hasta ahora, se trata de un fracaso ya que los 42 Estados adherentes son todos Estados del Sur. Los sindicatos consideran además que dicho tratado proviene de una diplomacia paralela, al término de la cual los representantes de las sociedades civiles fueron víctimas de cooptación y dejados al margen de las negociaciones. Finalmente, los sindicatos estiman que las discusiones entre las asociaciones de diásporas y las ONG no fueron transparentes, así como denuncian dicho proceso, organizado fuera del marco de las Naciones Unidas.

Sin embargo, grandes organizaciones como el ACNUR, OIM, CCIM (Comisión Católica Internacional de las Migraciones) y la OIT realizaron un balance positivo de la actividad, recalcando su dimensión progresiva. En efecto, mientras que el Foro de Bruselas insistió en la pertinencia de la metodología desde los Derechos Humanos, el de Manila se dedicó, por su parte, a ponerla en práctica. En cuánto a la cumbre de Atenas, se planteó la cuestión desde el punto de vista del desarrollo de los países de origen y de destino.

En Atenas, las principales propuestas que fueron expuestas por los protagonistas son las siguientes: 1) Integrar la migración a las estrategias de reducción de la pobreza. 2) Asegurar una mejor coherencia y coordinación entre migración y desarrollo en las políticas nacionales. 3) Recolectar datos sobre las migraciones circulares en los países de origen y acogida. 4) Reunir los perfiles migratorios y las experiencias de retorno al país, incluyendo las diásporas. 5) Comparar las prácticas de integración y protección social más satisfactorias. 6) Reducir el costo de las transferencias de fondos. 7) Estudiar el resultado de estas transferencias en el bienestar de las poblaciones que se quedaron en sus respectivos países. 8) Analizar el impacto del cambio climático en la migración. 9) Proceder en todos estos puntos teniendo en cuenta una buena coherencia institucional.

A pesar de esto, ¿cuáles pueden ser las perspectivas de este Foro? A minima, los actores de la sociedad civil acordaron evitar en el futuro la política de la silla vacía. Para el próximo Foro, que se llevará a cabo en México en el 2010, dichos actores contemplan crear un espacio de debate global, más legítimo y creíble. Dentro de esta misma lógica, nuevas consideraciones para algunos conceptos imprecisos sobre todo aquellos de país de origen, acogida y tránsito estarán en el orden del día. Pero, como en materia migratoria la simbología es fundamental, incluir a Naciones Unidas y por ende al ACNUR será determinante para dar mayor consistencia a esta iniciativa. Desde ahora, está claro que debemos pagar este precio con el fin de realizar una gobernanza mundial para las migraciones.

Referencias

ICRMW (International Steering Committee for the Campaign for Ratification of the Migrants Rights Convention) Ed., Guide on Ratification International Convention of the Rights of all Migrant Workers and Members of their Families, Ginebra, Abril de 2009.
PNUD (Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo) Ed., Informe sobre desarrollo humano. Superando barreras: Movilidad y Desarrollo Humanos, PNUD, Nueva York, 2009.
Wihtol de Wenden Catherine, La Globalisation humaine, París, PUF, 2009.

PAC 9 – Hacia una gobernanza infra estatal de los Bienes Públicos Mundiales Las regiones en las negociaciones internacionales sobre el cambio climático

Por Simon Uzenat

Traducción : Daniel Del Castillo

Passage au crible n°9

Del 7 al 15 de diciembre de 2009 tuvo lugar en Copenhague la 15ª CP (Conferencia de las Partes) auspiciada por la CMNUCC (Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático). El objetivo era conseguir adoptar instrumento jurídico perentorio a nivel internacional con el fin de 1) reducir la producción mundial de gas de efecto invernadero (GEI) y 2) adaptar los modelos de desarrollo a las consecuencias previstas del cambio climático. El fracaso de esta cumbre no debe sin embargo, ocultar el nacimiento de estructuras originales de gobernanza de los Bienes Públicos Mundiales.

Contexto histórico
Marco teórico
Análisis
Referencias

Contexto histórico

La respuesta internacional a los cambios climáticos tomó forma con la adopción en 1992 de la CMNUCC. Ésta última estableció el marco institucional necesario para estabilizar las concentraciones atmosféricas de los GEI. En diciembre de 1997, los delegados de la tercera CP se pusieron de acuerdo en Kyoto sobre un protocolo que comprometía a los países industrializados mencionados en el anexo I a reducir hasta el 2012 sus emisiones globales de GEI a un promedio de 5,2% por debajo de sus niveles de 1990. El Protocolo de Kyoto entró en vigor el 16 de febrero de 2005 y finalizará el 31 de diciembre de 2012, sin que haya sido aún ratificado por la primera potencia emisora de GEI por habitante, Estados Unidos.

En diciembre de 2008 en Poznan, durante la 14ª CP, el Secretario Ejecutivo de la CMNUCC declaró que “50 a 80% de las acciones concretas dirigidas a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, y casi 100% de las medidas de adaptación a las consecuencias del cambio climático son aministradas a nivel infra estatal”. En septiembre de 2009, durante la Semana del Clima, el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, recalcó la importancia del papel de las entidades subnacionales. Por su parte, los activistas del IPCC (Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático) insisten en las disparidades territoriales, consecuencia del cambio climático. Según sus trabajos, las regiones litorales, islas pequeñas y, más generalmente, los PMA (Países Menos Avanzados) deberán asumir el 80% de los daños, de los que los países ricos asumen, sin embargo, el 80% de la responsabilidad.
Como otros actores periféricos de las negociaciones, las regiones se agruparon en organizaciones transnacionales más o menos especializadas. La más importante es NRG4SD (Network of Regional Governments for Sustainable Development) que nació durante la Conferencia del Milenio en el 2002, en Johannesburgo, y desde entonces programa sus eventos siguiendo el calendario de la CMNUCC. Fue así como NRG4SD dio su primera declaración sobre el cambio climático en el 2005 en Montreal, y trabajó intensamente en la 14ª CP de Poznan. Dentro de esta misma lógica, se creó en el 2007 en Marsella, el FOGAR (Foro Global de Asociaciones de Regiones).

A diferencia de los otros actores no-estatales, las regiones benefician de un estatus particular. De hecho, en las conferencias internacionales, las provincias belgas, los Länder alemanes o, en menor medida, las provincias españolas y canadienses, tienen sede en el centro mismo de sus respectivas delegaciones nacionales. Pueden entonces someter sus peticiones (enmiendas) directamente al Secretariado de la CMNUCC y, de este modo, colaborar en las diferentes etapas de las negociaciones. En este sentido, las redes de regiones consideradas como ONGs por la ONU, lo que les permite disponer del estatus de observadores se benefician indirecta y parcialmente de las relaciones sociales de algunos de sus miembros.

Marco teórico

La participación de las regiones en las negociaciones internacionales sobre el cambio climático replantea dos problemáticas centrales del proceso de la globalización :

1. La diplomacia privada. Gran cantidad de políticas definidas y puestas en marcha sobre el plano regional permanecen cualquiera que sea la naturaleza de las relaciones entre el Estado central y las colectividades locales estrechamente ligadas al tema del cambio climático (transportes, entorno social, energía, etc.). Así mismo, contribuyen a la transformación de la naturaleza de los vínculos entre los dos niveles de gobernanza, sobre todo en lo que a participación local de escala internacional se refiere. En el caso actual, hay que destacar el papel central que tuvo la Unión Europea en el reconocimiento del derecho de las autoridades locales a actuar a nivel internacional, especialmente gracias a los fondos específicos que despliega. Esta diplomacia privada combina además los repertorios de acción propios de las ONG, firmas multinacionales y Estados.
2. Los Bienes Públicos Mundiales. Tratándose de un Bien Público Mundial puro, el clima representa actualmente uno de los mayores puntos de interés de una gobernanza mundial, actualmente en construcción. Los problemas globales, tal como los percibimos hoy en día, no pueden en efecto arreglarse por la única vía de la cooperación interestatal. Requieren, al contrario, de una coordinación de acciones descentralizadas y mayoritariamente privadas. Este punto de vista permite, paradójicamente, legitimar de nuevo la intervención pública a escala internacional, al mismo tiempo que evidencia la necesidad de exceder el marco intergubernamental.

Análisis

La preparación, definición y puesta en marcha de políticas públicas medio ambientales es desde ahora compromiso de todos los niveles infra estatales, encontrándose en primer lugar el nivel regional. En un artículo sobre la dispersión de la autoridad estatal, Susan Strange incitaba, desde 1995, a reflexionar sobre la transmisión del poder del Estado central hacia las entidades subestatales. Al mismo tiempo, se aceleró la retirada de la autoridad estatal y su capacidad de regulación e intervención. De hecho, las entidades subestatales preceden frecuentemente, una nueva configuración del escenario gubernamental, ya que disminuyen los costos de entrada de actores excluidos hasta ahora. Desde la lógica de Weber, el Estado es entonces obligado a descentralizar y subcontratar algunas de sus políticas operacionales, favoreciendo de esta forma una nueva centralización de las decisiones. Por ende, estas dinámicas propician el aislamiento y fragilidad de las Organizaciones Internacionales. En efecto, la injerencia de nuevos jugadores representa la oportunidad de diversificar sus apoyos de mediación. Sin embargo, esto también amenaza su propósito de encarnar una gobernanza mundial.
El funcionamiento de las redes internacionales de colectividades locales permanece debilitado, a pesar de todo, por las desigualdades y diferencias de desarrollo que caracterizan la globalización. Dicha observación se confirma cada vez más, a medida que aumenta la cantidad de regiones del Sur débilmente abastecidas y a menudo marginadas en el seno de países, a su vez dominados.

El principal recurso de las entidades infra estatales consiste en adaptarse a las propiedades y obligaciones impuestas por la globalización, así como lo hacen las firmas multinacionales. Esto puede tomar la forma por ejemplo, de una búsqueda de economías a escala, un aumento de las cooperaciones entre lo público y privado, incluso el desarrollo de planes globales de comunicación. Durante la conferencia de Copenhague, así, sesenta líderes regionales participaron, el 15 de diciembre, en el Climate Leaders Summit 2009, organizado por The Climate Group. Se trata de un club internacional auspiciado por Tony Blair que reúne a unos cincuenta representantes de las más grandes empresas mundiales, además de unos treinta gobiernos regionales, entre los cuales se encuentran los de California, Québec y Baviera. Al respecto, se observa que la acción colectiva se explica más por una lógica de responsabilidad, que por una lógica de soberanía clásica. La liberación de la heteronimia estatal no debe ser en ningún caso entendida como el abandono o rechazo del marco estatal-nacional, ya que las conclusiones de Copenhague muestran, al contrario, su obligación. Es más conveniente considerarla desde un proceso mucho más amplio de dispersión de la autoridad política.

Referencias

Hocking Brian, “Patrolling the `Frontier´ Globalization, Localization, and the `Actorness´ of Non-Central Governments”, in Francisco Aldecoa, Michael Keating (Ed.), “Paradiplomacy in Action. The Foreign Relations of Subnational Governments”, Regional and Federal Studies, 9 (1), Primavera 1999, Págs. 17-39.
PNUD (Ed.), “La lucha contra el cambio climático: solidaridad frente a un mundo dividido”, Informe sobre desarrollo humano 2007/2008http://hdr.undp.org/en/reports/global/hdr2007-2008/chapters/spanish/
Strange Susan, “The Defective State”, Daedalus, 124 (2), Primavera 1995, Págs. 55-74.

PAC 8 – Las microfinanzas al servicio del desarrollo social Seminario Internacional de FOROLAC Fortaleza, Brasil, 7 9 de diciembre de 2009

Por Florent Bédécarrats

Traducción : Daniel Del Castillo

Passage au crible n°8

FOROLAC (Foro Latinoamericano y del Caribe de Finanzas Rurales) agrupa aproximadamente 350 IMF (Instituciones de Microfinanzas) al servicio de más de 2,5 millones de usuarios de este continente. En estrecha colaboración con el gobierno de Brasil, FOROLAC organizó en diciembre de 2009 un seminario sobre el tema siguiente: Agriculturas familiares, soberanía alimentaria y sistemas financieros rurales: desafíos y oportunidades frente a la crisis. Este evento internacional reunió a 600 participantes que representaron a la vez ONGs, movimientos sociales, gobiernos, bancos públicos, cooperativas y empresas privadas.

Contexto histórico
Marco teórico
Análisis
Referencias

Contexto histórico

Después del fin de la Segunda Guerra Mundial y las independencias, la mayoría de los Estados del Sur establecieron bancos públicos para financiar su desarrollo. Sin embargo, estos establecimientos padecieron numerosas disfunciones y usos clientelares. Obligando a los gobiernos a recapitalizarlos regularmente, contribuyeron al agravamiento de los déficits y al endeudamiento de los Países En Desarrollo. Con la crisis financiera de 1982, las IFI (Instituciones Financieras Internacionales) prestamistas en último recurso debieron auxiliar a los Estados deudores, imponiendo una serie de condiciones. Debieron, en particular, exigir la liberación de los sistemas financieros, reducción de los gastos públicos y desmantelamiento de los bancos de desarrollo.

Las microfinanzas se expandieron enseguida en el espacio social, omitido en las políticas de ajuste estructural. Su puesta en marcha fue progresivamente concentrada en manos de organizaciones especializadas que diversificaron sus ofertas, proponiendo servicios de ahorro o de seguros, tanto como transferencias nacionales e internacionales. Desde mediados de los años noventa, los grandes capitalistas internacionales que sostenían el sector se enfocaron en su porvenir financiero. Ordenaron a las IMF recuperar sus costos, y además producir beneficios, con el fin de apoderarse de las subvenciones y atraer los fondos privados. Se observó entonces un crecimiento en la cantidad de ONG microfinancieras que se transformaron en Sociedades Anónimas o incluso en bancos; al mismo tiempo que, las cooperativas de ahorro y crédito fueron dejadas a un lado.

Este modelo fue consagrado en 2006 con la atribución del Premio Nóbel de Paz a Mohamad Yunus y Grameen Bank, después con otras muchas distinciones internacionales. En términos de imagen, esta aura simbólica aumentó sin embargo el riesgo al que están expuestas las microfinanzas. Además, las críticas se multiplicaron, avivadas por prácticas abusivas y beneficios escandalosos realizados por ciertas IMF. En muchos países de América Latina como Bolivia, Ecuador o Nicaragua , los nuevos gobiernos socialistas adoptaron por ejemplo posturas particularmente hostiles en cuánto a las microfinanzas, buscando nacionalizarlas o reemplazarlas por nuevos bancos públicos.

Marco teórico

1. Normas y regulación de las microfinanzas. Defendiendo sus funciones a favor del desarrollo, pero permaneciendo regidas por los mecanismos del mercado, las microfinanzas borran las fronteras entre lo social y comercial, público y privado. Además que, a pesar de haber sido promovidas por actores transnacionales, como ONGs, agencias de desarrollo e inversionistas, las prácticas micro-financieras señalan intrínsecamente lo local. Como toda actividad financiera al por menor, se encuentran frecuentemente administradas y estrechamente reglamentadas sobre el plano nacional. Estos híbridos favorecen una forma de gobernabilidad de las microfinanzas, fundamentada sobre normas cuyos referentes fueron generalmente forjados en los foros internacionales.
2. Privatización de las políticas públicas de desarrollo. Durante las últimas tres décadas, las estrategias de los actores del desarrollo estuvieron marcadas por el paradigma neoliberal. Dentro de este contexto, los Estados fueron incitados por las IFI a relegar sus políticas agrícolas o de financiamiento a jugar un papel de facilitadores, con el fin de reforzar los mercados abiertos, poco regulados y competitivos. En materia de instrumentos, la intervención directa de la administración pública fue juzgada ineficiente y limitada, a beneficio de operadores privados, como las ONG o empresas comerciales.

Análisis

La crisis financiera y las recientes crisis alimentarias cuestionan el paradigma actual de desarrollo. En materia agrícola, las tensiones no derivan tanto de una falta de producción mundial, como de la distribución desigual del valor agregado. Sobre este punto, insistamos cuánto la liberalización comercial pone hoy en día en competencia directa a la industria agro con las sociedades campesinas mal capitalizadas (41% de la población mundial). En estas condiciones, los precios internacionales están fijados al nivel de la rentabilidad del 15% de los productores que registran los mejores rendimientos. Pero esta asimetría conlleva a un empobrecimiento de las poblaciones rurales, que representan el 75% de los mal nutridos del mundo. Dicho de otra manera, ahora que la FAO (Food and Agriculture Organization of the United Nations), el FIDA (Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola), e incluso el Banco Mundial, ponen en el centro de las prioridades de desarrollo al sector agrícola, la controversia aumenta entre los defensores de un incremento del modelo agro-industrial y los partidarios de una nueva valorización de las agriculturas familiares. Ahora bien, los gobiernos socialistas latinoamericanos, que conquistaron el poder gracias al apoyo de los movimientos populares campesinos, tienen tendencia a favorecer esta segunda alternativa.

Por otro lado, las microfinanzas presentan dificultades para llegar hasta los pequeños productores, expuestos a importantes riesgos. En efecto, éstos últimos no disponen generalmente de garantía alguna ya que no están beneficiados por ingresos regulares ni suficientemente sustanciosos, cómo para soportar las tasas de interés estructuralmente elevadas de las IMF. Por todas estas razones, las microfinanzas se concentraron generalmente en los medios urbanos, financiando particularmente las actividades micro de comercio y servicios practicados por los desplazados del éxodo rural. Este fracaso del mercado en asegurar el desarrollo rural, cuestiona la imagen generalmente mediatizada de las microfinanzas, además que alimenta el discurso de los gobiernos socialistas, que frecuentemente amenazan con tomar el control de las IMF y obligarlas a reducir drásticamente sus tasas de interés.

Por su parte, las IMF fortalecen varias asociaciones corporativas, que obedecen a estrategias diversas. Las más comerciales insisten, por ejemplo, en asegurar su reconocimiento jurídico y obtener apoyo en el ámbito de las instituciones internacionales o de los actores económicos determinantes. En cuánto a las organizaciones más sociales y rurales agrupadas en el marco de FOROLAC, esperan aumentar su legitimidad aproximándose a las organizaciones campesinas. Para lograr esto, desarrollan programas rurales o agrícolas y buscan establecer alianzas con los bancos públicos de desarrollo. En efecto, como a menudo aparece una tensión en las relaciones entre las IMF y los gobiernos, se trata en este caso, de lograr un acercamiento con el gobierno de Lula a fin de crear un precedente y proponer un modelo de referencia.

Referencias

Guérin Isabelle, Lapenu Cécile, Doligez François (Éd.), La Microfinance est-elle socialement responsable?, Revista Tiers-Monde, (197), En.-Mar. 2009.
Mazoyer Marcel, Roudart Laurence, La Fracture agricole et alimentaire mondiale: nourrir l´humanité aujourd´hui et demain, París, Ediciones Universalis, 2006.
Trivelli Carolina, Venero Hildegardi, Banca de desarrollo para el agro: experiencias en curso en América Latina, Lima, Instituto de Estudios Peruanos, 2007.